Edtech es un complemento de la educación presencial, que concilia la autonomía del estudiante y labor pedagógica del profesor. En otras palabras, las herramientas basadas en Edtech son el punto de equilibrio entre un enfoque educativo conductista (conocimiento unidireccional, donde el estudiante recibe el conocimiento) y la teoría social de la educación (donde el estudiante es un agente activo en su proceso de adquisición de conocimiento).
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Consecuentemente, a través de las herramientas tecnológicas como simulaciones en 3D, laboratorios interactivos, infografías, entre otros, los estudiantes pueden apropiarse de los contenidos vistos en clase y adelantar un proceso autónomo, que, por un lado, evidencie sus fortalezas y debilidades, según el caso de cada estudiante y, de otro lado, no solo se quede en la fase diagnostica, sino que le facilite una ruta para convertir sus debilidades en fortalezas. Por ejemplo, supongamos que el proyecto de un grupo de alumnos de Ingeniería Agroindustrial es entender el proceso de producción de queso.
El profesor ha explicado las especificaciones de los insumos necesarios, las consideraciones químicas y cada una de las etapas; luego, los estudiantes han manipulado bajo supervisión los equipos (el tanque de recolección; el filtro prensa; el tanque de desuerado y la bomba de alimentación a los filtros) … En este punto, abrir la válvula equivocada puede afectar seriamente el producto o los equipos. Entonces después de la primera (y quizá única) práctica presencial ¿Cuál sería el paso a seguir? Los proveedores de herramientas Edtech como VirtualPlant, permiten que el estudiante replique lo que hizo la planta de producción de quesos presencial, cuantas veces desee (o necesite), en una virtual. Esto fomenta la autonomía del estudiante, le permite entender las variables de una decisión u otra (aumentar la presión de la máquina, dejar el producto por más o menos tiempo en una etapa) sin comprometer equipos ni insumos. En otras palabras, el estudiante es más consciente, a través de las herramientas tecnológicas para la educación, de cómo ha llevado su proceso de aprendizaje, qué falencias tiene, qué contenidos necesita revisar y cuáles son las implicaciones de sus decisiones en el mundo real.
Esto no implica la desaparición de la figura del profesor, todo lo contrario, esta se fortalece ya que puede establecer la acciones a seguir en el aula con mucha más precisión. Siguiendo con el ejemplo propuesto, supongamos que, de un total de cuarenta estudiantes, veinticinco de ellos tienen problemas para separar la cuajada del suero y para conducir este último a un tanque de almacenamiento. El seguimiento del desempeño de los estudiantes en las plantas virtuales les facilita a los profesores identificar este tipo de falencias y diseñar un plan a seguir para completar la etapa de educación autónoma adelantada por los estudiantes en el aula presencial. Así, en el caso propuesto, lo pertinente sería aclarar las dudas de los estudiantes sobre la etapa del desuerado del queso, replicar la práctica en el laboratorio virtual (cuantas veces sea necesario), y, si hay lugar, repetir la práctica presencial.
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Recapitulando, Edtech les permite a los estudiantes tener un proceso de conocimiento autónomo y al mismo tiempo propicia que los profesores accedan a información pertinente, veraz y específica sobre los procesos autónomos de cada uno de sus estudiantes y, consecuentemente, les facilita tomar decisiones respecto a la orientación que debe tomar su curso de manera consiente e informada, así pueden modificar su plan de clase para cumplir con los objetivos trazados. Es por ello que la implementación Edtech en las instituciones de educación superior es una necesidad, ya que es una forma de direccionar y personalizar el trabajo extraclase y al mismo tiempo valorar, apoyar y promover la autonomía del estudiante.